Bucea por KukupaPunda Productions

miércoles, 23 de enero de 2013

ANGIO. QUÉ COÑO! cap. II

LOS CHINOS

 En el anterior capítulo de esta infame saga, hablé de gremios, y quería en este segundo episodio seguir incidiendo en ese aspecto. En el de los gremios o trabajos olvidados o infravalorados, que a términos prácticos prácticamente viene a ser lo mismo. Esta vez quiero rendir desde aquí un sincero homenaje a "los chinos" una definición que aunque sencilla, engloba una cantidad ingente de dedicaciones, establecimientos, oficios y/o trabajos, negocios... porque, qué coño?, de aquí a 10 años lo más tardar muy posiblemente todos nosotros seamos chinos, así que, para que después no digan que yo no lo avisé. Se aproxima la universalización y homogeneización global que convierta al ser humano en un ente de ojos rasgados y gesto extreñido (que no extremeño, pues el extremeño será como la aldea de los inmortales Astérix y Obélix, y resistirá siempre al invasor con una pócima que les hace invencibles: el menta poleo).

 El caso es que yo he elegido ponerme del lado oriental, porque total, con la mierda que ofrece occidente, por un lado, lo zumbaos que están los mahometanos y tal, por otro, pues hoy me ha dado por sentirme Akira, o Kim Jong Il o Benji Price

 Qué coño?! ¿Es que acaso no merece un homenaje, por ínfimo que sea, esa personita tan entrañable que te espera en la tienducha de la esquina (convertida ahora, como por arte de magia, en un gigantesco bazar), con esa carita sonriente, tan tierna, y con ese portátil siempre con películas en su idioma natal? No merece una consideración ese chino que te devolvió la golosina que tú tanto tiempo llevabas buscando a lo largo y ancho del mundo? ¿Acaso no flipas cuando llegas al mostrador y contemplas la mayor variedad de pendientes y demás bisutería (todo falso, eso sí, quien quiera peces que se moje el bolsillo), el mayor surtido de artefactos (en su mayoría inservibles) que jamás hayas visto en tu vida en tan poco espacio físico? Demonios, (léase con tono de Peter Griffin) ¿cómo... cómo... cómo... co... co... como...co...como lo hacenn???? 

 Yo no sé si usted, querido lector de la profunda Baviera (si es que lo hubiera), donde el Profeta Guardiola ha elegido establecer su nuevo punto de partida, o usted, amable lector bielorruso (no creo que haya ninguno), habrá notado ese auge tan notorio en el número de habitantes occidentales que pasean por sus poblaciones. Lo que es aquí, en las españas, se cuentan por millones. Pero me llama la atención un hecho curioso. Todo el mundo cuenta con que "los chinos" van a tener hasta la última memez que se nos haya pasado por la cabeza o hasta la chorrada más inconcebible que se nos ha roto en el momento más inoportuno. 

Todo el mundo dice: "necesito un pliego de la puerta con unas dimensiones de 15 milímetros x 29,7 pulgadas, iré a comprarlo a un chino". Y lo dice así, como si nada. Pues yo digo: qué coño!? ¿Acaso no merece por lo menos que cuando lleguemos al establecimiento en cuestión, no seamos tan ruines de salir habiéndonos guardado el pliego en cuestión en el bolsillo? 

Porque es de vox populi que en "los chinos" se cometen más robos que la Argentina del corralito. Lo que pasa que nadie dice nada (ni los chinos siquiera) porque a nadie le interesa. Pero no solo eso. También va otro y dice: "Oye, son las 3 de la mañana, hay que comprar priva que lo que hay no da, iré a comprarlo al chino"; sin advertir la carga de valor que contiene esa cotidianeidad con lo inhumano, es decir, sin darnos cuenta del trabajo que realizan nuestros amigos nipones. 

¿Te vende una birra la tienda de Doña Amparo? ¿Está tía Adriana abierta para suministrarte 3 litronas ni siquiera a las 10 de la noche? ¿Y el carrefour? Y ya ni hablemos del Lidl... No, qué coño, están los chinos. Ahí, imperturbables, inamovibles, hieráticos y con gesto grave pero a la vez risueño. 

 O ya no hablamos de las macroinstalaciones que se yerguen en los arrabales mal llamados polígonos (o políganos, según el ámbito). Todo el mundo alardea de ser el mejor, de tener un producto de máxima calidad a un precio increíble. Yo digo, qué coño?! Los chinos tienen el mejor precio. La calidad es cuasi nula o pseudo despreciable, pero qué más da! ¿Y el rato que te has dado recorriendo esas galerías que son pasillos enteros de tazas de cristal que parece aquello una sala de espejos? o la otra de limpiaparabrisas de todos los tamaños y modelos (incluso con motivos de Hello Kitty)? O el inmenso espacio dedicado a los adornos florales, que hace pequeña a la feria de Abril sevillana? 

Detalle de un chino en Salamanca
No creo que nos llevemos el producto que fuésemos buscando, mas eso sí, llevamos otros 5 o 6 zarrios que necesitábamos desde hace mucho. Incluso algún que otro regalillo pa la chorva, porque como hay de todo... 


Y es que son cada vez más el número de establecimientos regentados por algún humilde nipón. Desde los monumentales almacenes del exterior, dedicados al mundo del hogar, hasta el minúsculo local que había dos calles más abajo convertido ahora en frutería. Yo puedo comprender que la gente tenga miedo a lo venido de fuera, y más cuando, como en el caso que nos atañe, la propagación está siendo tan veloz como la epidemia de gripe española allá por 1918 (y la comparación no es por nada, no seáis ladinos). Yo comprendo que pueda haber una cierta sensación de rapto sutil, pero, qué coño? ¿Acaso no vamos todos a comprar a un chino? ¿Y no es menos cierto que lo hacemos como con chanza, con jocosidad? 

Estoy seguro que muy pocos de ustedes se han parado solo un minuto a pensar en qué sería de nosotros sin "los chinos"? 

Un mundo dominado por Coca-Cola y McDonalds. Un mundo de Whirpool y LG, de Sony o Ray-Ban. Un mundo de establecimientos con precios muy caros. Diría prohibitivos para la mayoría de nosotros. 

No voy a pedir tampoco una oda a lo oriental, ni una corrida de toro con sushi. No hombre no, una corrida de toro no. Pero un sushi igual sí, mira. Y también un aplauso a ese entrañable y rechoncho camarero del Wok al que iré a comer un día de estos el sushi. 

Pido un aplauso a los chinos.

BONUS TRACK

No hay comentarios:

Publicar un comentario