Bucea por KukupaPunda Productions

jueves, 17 de mayo de 2012

Cap. 1X05

Quién les iba a haber dicho simplemente hacía unas semanas a los humildes habitantes de un pueblo que a lo largo de su historia no vio si no agricultura, ganadería, procesiones y vino, que un convoy de periodistas se aproximaba al lugar con el propósito de filmar una de las célebres homilías faustinianas. De repente irrumpen en la plaza de la aldea la furgoneta de los chicos de la Sexta, un auténtico despliegue informativo por parte de Rtve, con periodistas de la época, como fueron Sánchez Dragó y el afeminado Jordi González. 
Los jóvenes telecincos se hacían un hueco en el coro de la iglesia donde liderados todos ellos por un vivaracho J.J Vázquez comentarían cada una de las máximas de Faustino durante la celebración, todo ello en un riguroso directo. Por orden expresa de la Città del Vaticano, dos coches de la RAI salieron el día anterior de la capital italiana con el único destino de conocer la revolucionaria forma de decir misa que tanto estaba revolucionando al mundo católico. El Vaticano en aquellos días estaba especialmente inquieto, ya que tanto revuelo alrededor de un sacerdote y que no fuere por polémicas relacionadas con abusos, etc se había convertido en todo un hito.
En menos de dos horas, Valdebárcena habíase llenado de periodistas. El último en llegar fue un sofocado PedroJota, en una vespino, lengua fuera y con el casco desabrochado, kodak en mano y un viejo micrófono de la cope. La peña de Intereconomía también quiso vilsumbrar aquél irrepetible momento, el de Faustino tomando el cáliz cigarro en mano, o la atípica imagen del monaguillo rapeando los sagrados mandamientos. Los más conservadores, como "el tío del parche" o García Serrano abandonaron la Iglesia por principios, al grito de "Ésto con el Caudillo no pasaba" (estamos en Abril de 1936, todo es pura dramatización). Los rojos de la mesa del debate de la Noria aplauden el acto, considerándolo un ataque directo al cristianismo, pero no, es simple y llanamente la manera de obrar de Faustino, el contacto más humano y de barra de bar con Cristo, el poder tomarte una caña con el Nazareno e invitarle a una tapa de patatera. Es el cederle el sitio a la virgen en la cola del super, es el compartir los 10 eurillos de paki que has comprado con el altísimo porque si no sufre insomnio por las noches... Faustino conocía bien la vida de los santos y la vida de sus superiores padres y la santísima trinidad, y sabía que eran más humanos de lo que el concilio de Trento se empeñó en negar. Cuando terminó la eucaristía toda la Iglesia rompió en una apoteósica ovación y aplauso propio de concierto de Raphael. Mas Faustino nunca mostraba cambio en la expresión de su ferruginoso rostro. Faustino nunca sonreía, pues jamás halló en un ninguna representación del señor sonrisa alguna. Faustino tampoco era amigo de las alabanzas y los peloteos. Por ello, sin decir nada, del mismo modo, acabada la misa tomó el grinder, y dándole gracias al Señor entró en su lugar más venerado, su santuario, aquella sacristía repleta de pósters de 2pac y de Notorious, de la Jurado y de Albert Plá, que en cuestión de minutos llenóse de aquel denso humo blanco del que siempre hablaba Faustino en sus experiencias marianas de trance y en sus conversaciones con San Judas Tadeo, con el que mantenía una estrecha amistad desde épocas de seminario. Le gustaba a Faustino recordar siempre en cada cena o en cada 20N cuando íbamos  de picnic y a rendir tributo o en i pranzi di natale e Capodanno (perdón, me he colao) la anécdota de cuando se equivocó y marcó sin querer el número de Judas Iscariote en lugar del de Tadeo, al parecer pilló al muy bribón en una de sus famosas fiestas con Sabina, Maradona y Charlie García y, por lo visto, le dio una contestación impropia para un santo.

Decir que aquél segundo Domingo de eucaristía, no se si la palabra del señor le llegaría a alguien de los allí presentes, dudo incluso que las abuelas enteráranse de algo ya que estaban más pendientes del peinado de Lydia Lozano que de la consagración, mas preocupadas por la palabra del Al Bano que por la del día de Pentescostés, mas interesadas por maguis de la talla de Julián Muñoz que del pobre ladrón clásico Zaqueo.
Telecinco, aquél día consiguió hacer un share de casi el 90%. Brutal.
Don Torcuato Luca de Tena, indignado, salió de su tumba a la mañana siguiente, presentóse en la redacción de ABC, misma que fundó con el sudor de su frente y acusó directamente a la comunidad gay de todo lo que estaba ocurriendo en aquella noble aldea asturiana.

"EL CASO VALDEBÁRCENA. FAUSTINO, PÁRROCO DEL PUEBLO INVITA A SU SACRA CEREMONIA A MULTITUD DE ROJOS, RÉPROBOS, ATEOS Y SARASAS DE TODOS LOS PUNTOS DE LA NACIÓN CON EL PROPÓSITO DE HACER CAER LOS PILARES BÁSICOS DE NUESTRA PATRIA, ANEXOS A ELLA DESDE EL PRINCIPIO DE LOS TIEMPOS"
                                                                                             .Madrid.ABC.T.Luca de Tena. 31 Abr.1936
...De lo que no fue consciente nuestro amigo Luca es que jamás tantos humanos se reunieron en una Iglesia tan pequeña como aquel humilde Domingo de Ramos asturiano.
Pero si bien el revuelo estuvo asegurado y durante toda la semana no cesaron de llover las críticas nayde dióse cuenta de lo que en realidad ocurrió aquel mediodía-tarde de Domingo de Ramos dentro de aquella sacristía. Y es que en la última calada de aquel weed liado en blunt la puerta abrióse de par en par como provocado por un golpe de viento, un humo más blanco y denso de lo habitual se abría paso, sonaban tambores de ejército romano en su cabeza. Un diablo de lo más sexy habíase presentado allí, ante él, recostado sobre sus piernas. Durante minutos no pudo ver ni entender nada...



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